El diputado radical Martín Tetaz pidió una sesión especial para debatir el proyecto de Reforma Sindical, pero no tendrá quórum porque el dictamen no es reconocido por la mayoría de los bloques opositores. De hecho no había conseguido los 16 votos necesarios en la Comisión de Legislación del Trabajo.
La controversia se instaló la semana pasada, cuando el dictamen que impulsan los radicales, con Martín Tetaz a la cabeza, el PRO, la coalición cívica y los libertarios, que ahora quieren discutir en Diputados, no obtuvo las firmas necesarias que establece el reglamento.
A pesar de que el asesor estrella de Javier Milei e integrante del «triángulo de hierro», Santiago Caputo, había prometido que los libertarios no avanzarían en el tema, los diputados de La Libertad Avanza ayer se presentaron en la Comisión y acompañaron con su firma la iniciativa.
Se trata de un paquete de medidas que buscan limitar el poder financiero de los gremios, bajar la capacidad de organización de los sindicatos y detonar el modelo sindical argentino de unidad promocionada.
Pero si bien en la reunión participaron 31 integrantes, solamente 15 firmaron ese despacho. Es decir quedó a un voto de tener dictamen de mayoría para que sea trasladado al recinto.
El jueves último Tetaz envió una carta al presidente de la Cámara de Diputados, Martin Menem, para pedir que se incluya en la sesión ese expediente, a fin de determinar su validez, pero como eso no ocurrió solicitó la sesión especial.
«Si interpretamos de manera literal y aislada del reglamento una resolución de abril del 2010, una mayoría puede bloquear completamente el funcionamiento de una comisión, convirtiendo en una pantomima las reuniones y debates que allí ocurran, al bloquear un dictamen, sin construir otro dictamen alternativo», argumentó Tetaz al reclamar un tratamiento que, hasta el momento, no consiguió.