Los empleados de Brghstar se concentraron en las puertas de la planta para reclamar por la posibilidad de despidos inminentes.
Los dueños de la planta aseguran que la producción estará detenida hasta el mes de febrero. Por ello la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) regional Río Grande reclamó el viernes, bajo las consignas “En defensa de los puestos de trabajo, los derechos laborales, la industria nacional, el salario y nuestra soberanía”.
Los empresarios, como en todos los casos, intentan explicar su situación señalando que la falta de ventas de sus productos en el continente terminaron por producir un sobrestock como hace mucho tiempo no ocurría en Tierra del Fuego.
Mientras los trabajadores denuncian que, a espaldas del gremio, los responsables de la fábrica Brightstar continúan convocando a los operarios para «arreglar» su salida, pagando indemnizaciones por encima de lo que indica la regla.
El titular de la UOM, Oscar Martínez, le apuntó al gobierno nacional por los despidos en la provincia y aseguró que «el gobierno nacional busca expulsarnos de Tierra del Fuego» puesto que «el número de compañeros que han quedado en la calle producto del cierre de las puertas de las fábricas suma alrededor de 200 trabajadores y remarcó que «si bien no se han producidos despidos arbitrarios de parte de las empresas no descartamos que lo intenten llevar adelante en los próximos días o semanas”.