El reciente electo secretario general de la Federación de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios (CONADU Histórica), Luis Tiscornia, aseguró que el gremio entiende a las casas de altos estudios como «populares, científicas, soberanas, democráticas, al servicio de la autonomía nacional y de las mayorías».
El dirigente explicó que el contundente triunfo electoral de la Lista 4 que encabezó demostró y expresó «la comprensión de los docentes universitarios de que es clave garantizar una Federación autónoma e independiente de los gobiernos y los rectores».
El sindicalista se opuso a cualquier intento de ajuste en el futuro en todas las actividades nacionales y se pronunció por «la defensa de los derechos de los docentes y de la universidad pública», a la vez que señaló que de 93 congresales, 58 votaron por la Lista 4, triplicando los sufragios de la oposición.
«El principal desafío a resolver es el salarial. Un trabajador que ingresa a la universidad a tiempo completo, ocho horas diarias, percibe un haber de bolsillo de 11 mil pesos. Y el profesor titular, ubicado en la otra punta de la escala, con 25 o 30 años de antigüedad -la máxima categoría-, abona un 20 por ciento o más en concepto de impuesto a las ganancias», subrayó.
Tiscornia añadió que «las dos puntas del escalafón demuestran una muy grave situación salarial, más allá de la puja paritaria anual», y sostuvo que el otro gran desafío es «la aplicación del convenio colectivo, porque existe demasiada resistencia de parte de los rectores, por lo que será clave lograr ese objetivo».