Los trabajadores de la agrometalúrgica VHB en lucha recibieron el respaldo del Movimiento Campesino de Córdoba (MCC). VHB se encuentra ocupada por sus empleados en reclamo de deudas salariales y en defensa de sus fuentes laborales.
«El MCC y los trabajadores de VHB estamos juntos en la lucha. Respaldamos sus decisiones de asamblea y el sábado último compartimos una ‘campaña de cabritos’ en Oncativo, como apoyo concreto y para dar visibilidad a sus demandas», confirmó a Télam Favio Valinotti, portavoz de la organización campesina.
Valinotti explicó que desde hace años realizan «campañas de cabritos, sin intermediarios, para mejorar el precio que reciben los productores y bajar el que paga el consumidor, con una comisión para el vendedor que, en este caso, sirvió como ayuda a los trabajadores que no cobran sus salarios desde hace cuatro meses».
Alrededor de 35 obreros de la fábrica de maquinaria agrícola VHB iniciaron el 24 de junio la toma de las instalaciones de la empresa para reclamar el pago de salarios adeudados y aguinaldo, debido a la falta de respuesta de la patronal en audiencias en el Ministerio de Trabajo.
Además, afirmaron en comunicados que los dueños de VHB pretenden vaciar la fábrica para favorecer a las empresas de capital trasnacional Claas y Desico, con las que, según denunciaron, están vinculados.
Por su parte, el MCC sostuvo que «este modelo agroexportador, encabezado por las trasnacionales y los empresarios sojeros, no sólo desaloja a los campesinos sino que juega con la fuente de trabajo de muchísimas familias de las ciudades».
Sobre los dueños de VHB, subrayó que «no aparecen y nadie da una respuesta, mientras los trabajadores son apretados por las deudas que se van acumulando después de casi cuatro meses sin cobrar» salarios y el último aguinaldo.
«Han vaciado la empresa favoreciendo a las multinacionales Claas y Desico, que se enriquecen con las rentas de los monocultivos transgénicos a costa de la salud y la soberanía alimentaria de nuestros pueblos», además de arrasar el monte y la vida de familias de Oncativo, en el sur de Córdoba, «quitándoles una de las pocas fuentes de trabajo que les quedan».
El MCC se pronunció finalmente por la confluencia de «la lucha del campo y la ciudad contra este modelo capitalista y de monocultivo».