En un comunicado de prensa, tras defender la labor de los trabajadores del instituto y señalar que «lo que falla es la gestión», dijo no estar de acuerdo con la ampliación de la edad jubilatoria, tal como se sugirió desde algunos medios periodísticos a raíz de la interpretación de comentarios vertidos por el titular del PAMI, Carlos Regazzoni.
«Es cierto que el ser humano ha evolucionado en cuanto a salud y expectativa de vida -señaló Barreñada-, pero eso no significa que no tengamos que tener un límite para poder jubilarnos».
En ese caso, puntualizó que «si una persona empieza a trabajar a los 18 años, cuando llega a los 65, ha trabajado 47 años, lo cual es muchísimo. La segunda razón es que si seguimos trabajando hasta una mayor edad, los que vienen atrás no van a conseguir trabajo, sobre todo en un país como el nuestro, donde no hay mucho trabajo disponible».
El dirigente gremial explicó que «el verdadero problema radica en que el 50 por ciento, o más, de los trabajadores no aportan, porque trabajan en negro. Entonces, creo que tenemos que empezar por blanquear al trabajador, en darte lo que le corresponde como derecho, es decir una obra social, aportes jubilatorios, y no preocuparnos tanto por ampliar la edad jubilatoria».
En otro orden, el titular de la Unión de Trabajadores del Instituto (UTI), se refirió a los problemas de atención que existen en el PAMI y dijo que «las demoras, los turnos para dentro de uno o dos meses y la falta de insumos o de elementos no son responsabilidad de los trabajadores del PAMI, sino de la gestión».
«Cualquier gestión de cualquier signo político que no gestione bien, nos lleva a los trabajadores del PAMI a vivir situaciones absolutamente incómodas», señaló.