En un expediente de siete páginas que lleva fecha de hoy 26 de mayo, y la firma de la directora de Asociaciones Sindicales, Elena Otaola, el Ministerio le quitó validez a la elección que el michelismo tenía -y todavía tiene- programadas para el 29 de mayo.
En sintonía con sus posiciones previas, la resolución ministerial es una respuesta a la impugnación presentada por la CTA oficial de Hugo Yasky. Y en líneas generales, avala el cuestionamiento realizado por Yasky respecto al uso indebido de la inscripción de la Central de Trabajadores de la Argentina por parte del micheismo.
«En virtud de todo lo aquí expuesto, no cabe sino desconocer la valiez de la convocatoria y de la eventual realización de las elecciones Generales convocadas para el día 29 de mayo de 2014», remata el expediente número 1407454.
Para justificar su decisión, el fallo del Ministerio hace un repaso histórico desde las elecciones del 2010, cuando la CTA se fracturó en dos partes, una afín y otra ultra-crítica del gobierno nacional.
A fines del 2010, la elección general había resultado favorable al michelismo por pocos votos. Pero el sector de Yasky denunció irregularidades en varias provincias, luego comprobadas por la justicia electora.
Ya en 2011, la Sala IV de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo impugnó el proceso electoral en favor de la posición del sector que lidera Yasky. Y ante la decisión de la CTA de Micheli de no continuar con la apelación ante la Corte Suprema del proceso judicial, el Ministerio resolvió prorrogar los mandatos vigentes al momento, habilitando la continuidad de Yasky como Secretario General de la Central hasta el 2014.
En su actual pronunciamiento, el ministerio incluso recuerda que «no cuentan con validez las elecciones por las cuales se invistió al Sr. Micheli como Secretario General». En conclusión, el fallo expone que el michelismo «no se encuentra legitimado para convocar per se a elecciones».
La Central oficial de Yasky, por su parte, también se preparaba para realizar su propio proceso electoral para este año, pero todavía sin fecha. «Ellos pueden hacer lo que les parezca mientras no usen la inscripción de la CTA», opinó Yasky, como argumento para presentar la impugnación, ahora avalada por el Ministerio.
A nivel político, más allá del reciente revés ministerial, las elecciones convocadas por Micheli también arrastraban algunas objeciones. Por ejemplo, un sector de los estatales de ATE Entre Ríos decidió desconocer el llamado a elecciones por «ilegal». En la Capital Federal, la «La Verde de Germán», agrupación integrada por la mitad del Consejo Directivo porteño, también rechazó los comicios motorizados por Micheli.
En busca de su reelección, Micheli además iba a enfrentar una lista opositora: la Coordinadora Sindical Clasista del Partido Obrero (PO) con otras agrupaciones de izquierda gremial. Pero ante la resolución del ministerio conducido por Carlos Tomada, toda la legitimidad y hasta sentido político de los comicios.