En Argentina «el trabajo infantil es un delito» contra el que no hubiese sido posible avanzar «si no hubiera habido en el país un proyecto que dignifica el trabajo y la educación», afirmó hoy el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, al lanzar una nueva campaña contra la explotación laboral de los chicos.
«Es criminal dejar que un niño de menos de 16 años trabaje; y descuidar el trabajo de adolescentes entre 16 y 18 también», definió Tomada.
El Ministro enfatizó: «Aunque hemos mejorado mucho todos estos años, no descansaremos hasta lograr que todos los adultos trabajen y que todos los niños y adolescentes vayan a la escuela».
El desafío a 2017 es llegar a esa meta y en esa línea Tomada lanzó hoy una campaña que incluye spots en radio y televisión, y folletería; además de una guía con estrategias para erradicar el trabajo infantil.
Tomada pidió a referentes de sindicatos, de empresas, académicos y especialistas en infancia presentes en el auditorio del Ministerio de Trabajo «ayudar a difundir que en ningún lugar la cadena de valor de las empresas puede aparecer un niño o un adolescente», mensaje que plasma un video institucional.
«En Argentina ya no se discute más como antes: si es bueno o si es malo el trabajo infantil. Despejada esa discusión, dada la batalla cultural y la articulación de los controles, espero con los sindicatos a la cabeza, avanzar hacia la plena erradicación plena del trabajo infantil», convocó.
Entre las consignas más fuertes de la campaña 2015 sobresale la imagen «del martillo que se prolonga en un lápiz», que logra confrontar el «No al Trabajo Infantil» con el «Sí a una educación de calidad».
Otro folleto informa que «los adolescentes pueden trabajar solamente bajo condiciones especiales de protección» y «el trabajo adolescente protegido es trabajo decente», para añadir los requisitos que por ley debe cumplir un empleador si contrata a un chico de entre 16 y 18 años.
Pilar Rey Méndez, presidenta de la Comisión Nacional de Erradicación de Trabajo Infantil (Conaeti) reivindicó que Argentina «tiene un marco legal» y mencionó la Ley 26.061 (de Protección integral de Niños, Niñas y Adolescentes) y la Ley 26.390 (de Erradicación de Trabajo Infantil) además de la normas que regulan el trabajo agrícola y el de casas particulares.
«Argentina, dijo Rey Méndez, ha asumido el compromiso de liderar en América Latina el desafío de erradicar el trabajo infantil a nivel regional»; y con miras al próximo Plan Nacional 2016-2017, anunció que la Organización Internacional del Trabajo «se comprometió a acompañar con una evaluación externa el seguimiento del período».