La convocatoria del gobierno bonaerense a los dirigentes gremiales será para «dialogar sobre la agenda educativa» enmarcada en el proyecto del Presupuesto provincial para 2015. La idea del Sciolismo es bajar la tensión y el descontento que se generó en las últimas horas entre los maestros por la no jerarquización de la educación en el proyecto de ley.
La invitación, que llegó a los distintos sindicatos que habían anticipado ayer la adopción de medidas de fuerza, es un gesto de la gobernación para adelantar la discusión paritaria que partió desde la Jefatura de Gabinete bonaerense a cargo de Alberto Pérez y la dirección General de Cultura y Educación provincial, que conduce Nora de Lucía.
Sin embargo, no se informó si en los temas de «agenda educativa» se incluye la asistencia económica para antes de que concluya este ciclo, tal como lo plantean las organizaciones sindicales.
Tampoco la información oficial dio da cuenta de si en el encuentro se dialogará sobre la alternativa de adelantar la discusión paritaria para los primeros días de enero, posibilidad que se baraja en el gobierno de Daniel Scioli ante reclamos gremiales.
Oficialmente, el ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, advirtió que para adelantar las negociaciones paritarias «hay un dato que no se puede soslayar, que es la paritaria nacional que pone exigencia para que se cierre un acuerdo».
Los referentes de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) y del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) aprobaron el martes pasado un paro de 48 horas en reclamo del aumento del presupuesto educativo para 2015 y el llamado a paritarias antes de fin de año.
María Laura Torre, secretaria gremial de SUTEBA, aclaró que «la fecha de paro se va a coordinar junto con el plan de acción con el Frente Gremial docente», que integran con FEB, la Unión de Docentes de la Argentina (UDA), la Asociación de Magisterio de Educación Técnica (AMET) y el Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP), aunque este último anticipó que no están dispuestos a parar.