El salario mínimo en dólares siempre ha posicionado a la Argentina como el país que tenía el indicador más alto en cuanto a la ganancia de los trabajadores, al menos en Sudamerica. Según un relevamiento del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), Argentina cayó del primer al cuarto lugar en 2018.
Si se tiene en cuenta el comienzo de la presidencia de Mauricio Macri se observa que en noviembre del 2015 -sobre el cierre del mandato de Cristina Fernández de Kirchner- el salario mínimo en dólares era 589 ocupando el primer lugar en la región. Según el estudio realizado en mayo de 2018 alcanza los 384 dólares y está en el cuarto lugar.
Teniendo en cuenta la variación porcentual se trata de una merma del 34,8% en el salario mínimo local medido en moneda dura, en dos años y medio. Considerando sólo el último año, el retroceso es del 27%.
“Tras la suba de la moneda estadounidense se espera una fuerte presión inflacionaria que termine impactando negativamente en la producción y en el poder adquisitivo de la población”, explicó el economista Santiago Fraschina.
Además el informe económico explica que Argentina fue el país que más desvalorizó su moneda en el último mes. El indicador alcanza un negativo del 22,4%, siendo Venezuela el único de la región que peor le fue durante mayo.