La CGT saludó la llegada de Sergio Massa como súper ministro. Además tendió puentes para una cumbre que podría concretarse la semana próxima. Silvina Batakis se va de Economía sin haber tenido una reunión con la central obrera.
Ayer, casi inmediatamente, la CGT manifestó su apoyo a «los cambios en el gabinete impulsados por el Gobierno» y sostuvo que confía «en la orientación productivista y de desarrollo industrial que dará el compañero Sergio Massa a la economía argentina».
La bienvenida al «compañero» Massa contrastó con la frialdad que mantuvo la central obrera con Silvina Batakis, su antecesora que no fue saludada formalmente a su arribo ni mantuvo un diálogo fluido con Azopardo. Es más, si bien breve, en su paso no hubo cónclaves de peso con la CGT.
En ese contexto, los dirigentes ya iniciaron las gestiones para que la semana próxima haya una cumbre cegetista con Massa. Sería una demostración de respaldo y un guiño para lo que, consideran, es el inicio de una nueva etapa del Gobierno del Frente de Todos.
De hecho hoy mismo Daer, calificó de «una decisión inteligente del Presidente» el arribo de Sergio Massa al gabinete «en un momento crítico donde las presiones devaluatorias se mantuvieron durante 3 semanas».
«Se suma al gabinete a una persona con volumen político», señaló el dirigente en declaraciones a Radio 10.
Los vínculos entre Massa y el sindicalismo son más que sólidos y se remontan a varias décadas.
Para muestra vale recordar que dos de los triunviros de la CGT fueron parte de las filas del Frente Renovador, que uno de los Moyano engrosó su tropa desde Azopardo y que los gremios del transporte supieron abrirle la puerta y erigirlo como el mejor de los candidatos en 2015.