Un accidente de tránsito en las calles de la Ciudad expuso la inseguridad a la que se exponen los pasajeros de la aplicación de transporte que funciona de forma ilegal. El chofer, que chocó a una moto, se dio a la fuga. El auto era robado y el pasajero quedó abandonado. «Es una práctica habitual producto de la falta de controles y la impunidad con la que operan las plataformas», advirtieron desde el Sindicato de Peones de Taxis.
Un accidente cotidiano en el intenso tránsito porteño se convirtió en un episodio que expuso la inseguridad y la extrema fragilidad a la que son expuestos los pasajeros de las plataformas digitales de alquiler de vehículos.
Según reconstruyó el portal Notitrans, un Ford Ka dominio AD524EW embistió con un pasajero a una moto provocando daños materiales. El auto había realizado una violenta maniobra para tomar la calle Bouchard, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sin ver al motovehículo.
Al detener su marcha, el accidentado exigió la documentación del vehículo del conductor. Este procedió a entregarle la cédula Verde a nombre de Ramiro Truffa y un seguro vigente de la empresa Mercantil Andina. Toda la rutina normal.
Pero cuando el siniestrado, según relató en sede policial, le exigió el registro de conducir y DNI, para sorpresa del pasajero, el conductor se negó a entregarlo diciendo que «estaban en su casa». Tras negarse a prestar la documentación requerida, y al ver que se pedía apoyo policial al 911 para determinar su identidad, el conductor de la plataforma se dio a la fuga dejando el auto abandonado en el lugar.
El pasajero, que quedó abandonado con el auto, se reconoció usando la plataforma Uber.
Al arribar al lugar el personal policial comprueba que se trataba de un auto robado y denunciado en la provincia de Buenos Aires el 27 de abril en la localidad bonaerense de Madero, en Lomas de Zamora, y que tenía la patente cambiada, pero con sus papeles en orden y seguro vigente. Todo apócrifo, pero «a la vista legal».
El portal Notitrans pudo constatar posteriormente que el vehículo no registraba pedido de captura, a pesar de sus propietarios habían hecho la denuncia. Eso demuestra que, a pesar que en CABA actualmente existan lectores de patentes, las fallas del sistema están a la vista ya que la base de datos no funciona desde hace dos semanas.
Habrá que ver si la empresa Uber accede a brindar datos del conductor y auto registrado. Todo depende de su buena fe ya que en la práctica funciona de forma ilegal.
Desde el Sindicato de Peones de Taxis que encabeza Jorge García, explicaron que esto es habitual «producto de la falta de controles y la impunidad con la que operan las plataformas», amparadas por las políticas de transporte de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta.
«A nosotros no solo nos preocupa la precarización laboral que imponen estas plataformas, sino que se tome conciencia que el que está en peligro es el pasajero, expuesto a estos hechos delictivos. Hoy gracias al accidente hay un vehículo menos para cometer delitos», remarcó García.
También sostuvo que «venimos exigiendo que las plataformas se acojan a la vigencia de las normativas legales, algo que es imposible, con los cual estos hechos se irán multiplicando lamentablemente».