La cooperativa textil Cueroflex es un caso testigo del impacto devastador de los tarifazos en los sectores productivos. Mucho más en aquellos autogestionados que hacen importantes esfuerzos para sostener los empleos.
Cueroflex se ocupa de trabajar con cuero reconstituido y en ella tienen empleo 80 cooperativistas. Pero su continuidad está en duda por estas horas. Es que el aumento de las tarifas la podría llevar a la quebra debido a que le llegó un factura de luz que supera los 6 millones de pesos.
En enero de 2016 Cueroflex pagaba 47 mil pesos y ese era el mes de más consumo, había contado el Presidente de la Cooperativa Jorge Reisch, luego del primer impacto de la suba de tarifas que le llevó la factura a los 800 mil pesos.
«La Cooperativa de Trabajo Cuero-Flex, ubicada en San Martín, recibió factura de luz por más de $6 millones. La Alianza Cambiemos ataca al trabajo, a los trabajadores y al pueblo en su conjunto con sus políticas que sólo benefician a los ricos», tuiteó en los últimos días Walter Correa, líder del gremio de Curtidores y diputado electo.
CueroFlex es una una fábrica recuperada desde el año 2012, y es el sostén de muchas familias. Es la única fábrica de cuero restituido en Latinoamérica que realiza un proceso de reciclaje del cuero.