El jueves por la mañana, los empleados despedidos y los representantes de recursos humanos de Unilever se reunieron por última vez en la delegación local del Ministerio de Trabajo, en un último intento para reincorporar a parte de los trabajadores, los abogados de la empresa no dieron marcha atrás en las negociaciones.
De esta manera, Unilever volvió a ratificar los 21 despidos y confirmó que ya hay 16 trabajadores que cobraron sus indemnizaciones.
En representación de los trabajadores estuvo Oscar Casco, secretario Gremial del sindicato de Químicos y Petroquímicos de Zárate, quien infructuosamente intentó recuperar parte de los puestos de trabajo perdidos por la “adecuación de la estructura operativa de la planta”.
Ángel Cabezas, responsable de la Delegación de Trabajo Gualeguaychú, explicó que “los plazos de conciliación ya terminaron y ambas partes quedaron liberadas a seguir las negociaciones o pasar a las acciones gremiales en el caso del Sindicato”, en declaraciones a El Día de Gualeguaychú.
Cabezas agregó además que “solo quedan cinco trabajadores que no acordaron el monto indemnizatorio, pero esas negociaciones podrán hacerse de forma extraoficial entre la empresa y los trabajadores”.
Al término de la reunión, el representante sindical Oscar Casco denunció a la empresa por “atentar contra el sistema sindical” e informó que la puesta en marcha de una medida de fuerza: “Se comienza a cumplir un paro por 24 de horas como protesta por no la reincorporar a la gente que quiere seguir trabajando. Es por eso que desde las 22 del jueves, el resto de los operarios de Unilever decidieron paralizar la planta 24 horas en solidaridad con estos cinco compañeros despedidos”.
Según había informado Unilever el pasado 5 de julio mediante un comunicado, los despidos fueron parte de un proceso de adecuación de la estructura operativa de la planta de Gualeguaychú: “Unilever ratifica el estricto cumplimiento de la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo y Seguridad Social de la provincia de Entre Ríos y reafirma su compromiso con el desarrollo de la comunidad de Gualeguaychú y la seguridad de todos sus procesos productivos”, sostenía el comunicado al comienzo.
“Esta adecuación fue una medida extrema que tomamos luego de implementar cambios en todos los otros aspectos de la operación y es el único camino para que la operación local siga siendo viable y preservar los más de 220 empleos directos y más de 500 indirectos que generamos en Gualeguaychú”, concluyó su explicación.