La Unión Ferroviaria, que conduce Sergio Sasia, sostuvo que, ante la medida de ayer de no prestar tareas por parte del cuerpo de delegados del Sarmiento, fue totalmente inconsulta.
El ferrocarril Sarmiento funcionó ayer por la tarde con demoras e interrupciones del servicio, a modo de protesta, por la negativa de los guardatrenes a realizarse los testeos de alcoholemia obligatorios. Por su parte, la Unión Ferroviaria indicó que: “El personal que está ligado a la corrida de trenes, de acuerdo a la reglamentación no puede negarse al control de alcoholemia, salvo que exista otro tipo de metodología implementada por ocasión especial”.
“Rechazamos y no avalamos ningún tipo de medida que atenta directamente con el estatuto, las normas y leyes vigentes y principalmente afectan a miles de usuarios que se ven imposibilitados de regresar a sus hogares”, aseguraron desde el sindicato liderado por Sasia, también Secretario General de la poderosa Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT).
Además, destacaron que: “Toda medida de estas características, en base a los estatutos vigentes en la Unión Ferroviaria, se pueden tomar solamente desde el Secretariado Nacional de la Unión Ferroviaria. Y en este caso, no ha habido ningún tipo de medida que disponga la organización”.