Ricardo Salerno y su comitiva tenían mandato hasta el 2 de enero de 2019 pero se encontraba suspendido. «A través de un informe del Tribunal de Ética, con su cuerpo colegiado -a raíz del informe donde aconsejaba de los hechos que sucedieron en el último año y medio- destituir a toda la junta ejecutiva», dijo anoche Jorge Kiener, secretario Interior de Uta nacional en declaraciones a Cadena 3.
La decisión fue tomada durante un Congreso Extraordinario convocado con antelación para ayer, donde a su vez se confirmó que la Regional continuará intervenida, con el santafesino Luis Arcando a la cabeza y anticipó la creación de una Junta Normalizadora, compuesta por trabajadores locales. El arribo a tal conclusión se produce poco después del conflicto que tuvo a la ciudad capital por diez días consecutivos sin transporte urbano, y en el marco de un informe del Tribunal de Ética que evaluó la gestión de Salerno, que debía concluir en enero de 2019 y cuya fecha es el plazo máximo para convocar a elecciones.
En tanto, en referencia a los cerca de docientos choferes despidos Kiener sostuvo: “No vamos a salir en defensa de los delegados. Nos preocupan los despedidos”. Tras considerar a los representantes como “irresponsables”, remarcó que espera “que sean los trabajadores” quienes los saquen, aunque no descartó que el Tribunal de Ética pueda suspenderlos. En diálogo esta mañana con Radio Universidad, Kiener sostuvo que son los delegados los que tienen que entender que “así como hay fueros que los protegen, cualquier locura puede terminar mal”.
Respecto a la decisión de las empresas prestatarias de suspender a delegados, remarcó que en este caso “no nos interesa”, desatendiendo su condición. Sin embargo, agregó: “Es cierto que ese tipo de actitudes, con desafueros gremiales, no nos agradan mucho. Porque si se hace tan seguido, todos corremos riesgo”.
Finalmente, el secretario general aclaró que el gremio nacional está negociando los despidos de los trabajadores por las medidas de fuerza.