En los primeros cuatro meses del año se perdieron nada menos que 94.500 empleos en blanco siendo la construcción y la industria los dos rubros más golpeados, según datos del Ministerio de Trabajo.
En abril la baja fue de 28.600 empleos registrados, debido a las menores contrataciones y mayor morosidad entre los trabajadores independientes, entre monotributistas y autónomos.
De acuerdo con la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de mayo el total de trabajadores registrados disminuyó de 12.368.600 en diciembre de 2017 a 12.274.100 en abril pasado, lo que equivale a una baja del 1,7%.
Según los datos difundidos por el Ministerio de Trabajo, los asalariados e independientes no registrados o en negro suman unos 7.000.000 y 1,5 millones los desocupados, conformando una población activa de casi 21 millones de personas.
Entre los asalariados privados se perdieron 39.800 empleos, monotributistas (2.000), los autónomos (500) y monotributistas sociales (5.700).