«La llegada de Obama no es bienvenida para los trabajadores. El presidente arribará en ocasión de conmemorarse el 40° aniversario del golpe cívico-militar que ensangrentó el país. Obama no es bienvenido porque los trabajadores no olvidan el rol activo de la CIA y el Pentágono en el exterminio selectivo de militantes y dirigentes populares de América Latina, perpetrado con la autorización de la Casa Blanca durante el Plan Cóndor», señaló un comunicado firmado por Hugo Yasky y Carlos Girotti, jefe de Prensa de la CTA de los Trabajadores.
Los dirigentes de esa CTA añadieron que tampoco es bienvenido porque llega para respaldar «la decisión del gobierno de entregar soberanía al claudicar frente al juez Thomas Griesa y los fondos buitre, en lo que constituye la antesala del regreso a la picadora de carne del Fondo Monetario Internacional (FMI)», puntualizaron.
Los sindicalistas añadieron que «la última vez que un presidente estadounidense pisó el país debió irse con el portazo en la cara de un pueblo movilizado y de los presidentes latinoamericanos, que dijeron no al ALCA y al intento de convertirlo en patio trasero».
La central del docente Hugo Yasky marchará mañana junto con los organismos de derechos humanos y los sindicatos de la CGT y la CTA para conmemorar el 40° aniversario del golpe militar.
Por su parte, la CTA Autónoma de Pablo Micheli ratificó en un comunicado de prensa firmado también por el secretario de Derechos Humanos, Hugo Blasco, las movilizaciones de mañana en todas las plazas del país para homenajear a «los desaparecidos durante la dictadura militar» y rechazar «la visita del presidente Obama».
«El 24 de marzo de 1976 es una fecha símbolo porque entonces se inició de manera formal una de las etapas históricas más terribles de la historia argentina. Se conmemora la instauración de una dictadura cívico-militar que hizo del terrorismo de Estado la herramienta para aplicar un genocidio y se recuerda a los miles de compañeros que perdieron la vida y a todos aquellos que fueron perseguidos, presos, torturados y exiliados», puntualizó.
Para la central, «la realidad nacional y regional demuestra un claro avance en la restauración conservadora de derecha con gobiernos que, lejos de avanzar en la profundización de cambios que generen una sociedad justa, democrática y plural, tienden otra vez a ejecutar políticas por mandato de Estados Unidos y de los agentes económicos y financieros que le otorgan sustento».