«Hay que ser prudentes y esperar hasta la semana que viene, que vence el plazo de diez días que puso el gobierno. Hay compañeros que están más apresurados. Yo no quiero hacer un paro político», dijo el secretario General de la UTA, Roberto Fernández, en declaraciones a radio Futorock.
En ese marco, el dirigente gremial añadió que «no hay que apresurarse ni presionar de un lado ni del otro», y reiteró su pedido de «tener paciencia para sentar a ver qué va a proponer el gobierno ya que a través del diálogo vamos a buscar soluciones».
«Tenemos que preocuparnos más por las fuentes de trabajo que por el salario. Yo no quiero hacer un paro político. Si hacemos un paro, ¿al otro día qué?», se preguntó el dirigente y dijo que la decisión de convocar a una medida de fuerza «hay que analizarla con toda profundidad y hay mucho que discutir en una mesa antes de llegar a un paro».
No obstante, admitió que, «si el gobierno no nos convence» con su propuesta, «tendremos que llevar adelante lo que no queremos hacer, una medida de fuerza».
En este sentido, planteó que «con un bono de mil pesos no van a convencer a la gente» y consideró que una ayuda extra antes de las fiestas de fin de año «tiene que estar arriba de los 2 mil o 3 mil pesos».